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Para estas fechas tan señaladas, no podemos olvidarnos de uno de los postres que más de moda se está poniendo en nuestras mesas.
Os proponemos una receta sencilla que podréis tener preparada en el congelador para disfrutar con los vuestros cuando más os apetezca. Eso sí, recordad que tenéis que descongelar y maridar con amor y buena compañía. El vino, cava... lo dejo a vuestra elección, o bien podéis preguntarle a MauroTarlant, nuestro experto en maridajes.
Bizcocho de chocolate
6 claras de huevo
185 gr. azúcar
6 yemas de huevo
55 gr. cacao
Montar las claras y, cuando ya estén bien montadas, añadir el azúcar, ya que así conseguiremos que estén más firmes. Incorporamos rápidamente las yemas, sin remover demasiado, para evitar que nos bajen y el cacao tamizado.
Estiramos sobre un silpat o sobre una bandeja de horno cubierta por papel de horno. Cocemos a 220 ºC durante 6 minutos.
Mousse de chocolate
125 gr. chocolate Guanaja al (recomendamos esta variedad de chocolate, aunque se pueden usar otras), siempre en torno al 70% de cacao
80 gr. nata líquida
3 yemas de huevo
250 gr. nata semi-montada (reservada en la nevera)
Fundimos el chocolate al baño maría o sobre placa de inducción a baja temperatura, hasta que alcance unos 40-45 ºC. Calentamos la nata líquida también a 40-45 ºC y mezclamos.
Añadimos las yemas de huevo y la nata semi-montada. Reservamos en nevera.
Si queremos que la mousse salga perfecta lo ideal es tener el chocolate y la nata a 40ºC a la hora de hacer la mezcla.
Gelée de cacao
140 gr. agua
180 gr. azúcar
60 gr. cacao
120 gr. nata líquida
4 hojas de gelatina (2 gr. cada hoja)
Ponemos la gelatina a hidratar en agua fría. Calentamos el agua con el azúcar y la nata. Una vez caliente añadimos el cacao al líquido y sin parar de remover hervimos.
Fuera del fuego añadimos la gelatina hidratada y escurrida. Pasamos por un chino y enfriamos a temperatura ambiente. Conservar en nevera hasta que la necesitéis.
Si observáis que se os ha cuajado en exceso, podéis calentarla un poco hasta que se vuelva líquida. Cuidado con la temperatura, pues se puede quemar.
Acabado
Cubrimos la plancha de chocolate con la mousse. Enrollamos, como si se tratase de un brazo de gitano y congelamos.
Una vez congelado, bañamos con la gelée de cacao y decoraremos al gusto.
Os recomiendo no bañar el bizcocho hasta que no lo vayáis a descongelar, pues si lo bañáis y lo devolvéis al congelador el baño perderá brillo.